domingo, 25 de enero de 2009

Como apoyarse sin tener que cambiar

A las venusianas les gusta mucho hablar de sus problemas. Mientras que a los marcianos no, a ellos les gusta solucionarlos y punto.

Mientras una venusiana habla de sus problemas no quiere que le den soluciones, solo quiere que la escuchen y la comprendan. El marciano por su parte no sabe escuchar y suele escaparse de las conversaciones. La venusiana cree que si busca conversación con el marciano y exige que se implique él se abrirá a tener una conversación. Pero lo que ocurre suele ser que empieza una discusión de la que ambos saldrán lastimados.

Los dos pueden ser protagonistas del cambio. Es importante tener claro que no vamos a cambiar al otro, lo que vamos a cambiar es forma en la que encaramos la situación. La venusiana seguirá hablando de sus problemas pero el marciano puede aprender a escuchar, e implicarse mostrando que comprende lo que la venusiana dice y como se siente. Mientras tanto la venusiana en lugar de exigir al marciano que le manifieste sus sentimientos esperar a que el decida comunicarlos. Cuando una venusiana exige algo al marciano lo unico que consigue es que el marciano se aleje.

Si la venusiana deja de exigir y el marciano comienza a escuchar con atención, la comunicación será fluida y es muy probable que los resultados sean positivos para ambos.

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